Gobierno promueve inversión de US$ 1,5 millones para mejorar productividad de soja_29.04.2015
La Red Nacional de Biotecnología Agrícola contribuirá al incremento de la productividad y adaptabilidad del cultivo de soja en Uruguay a través del intercambio de conocimiento entre científicos, investigadores, empresarios y productores. Dispone de una inversión de US$ 1,5 financiado por Anii, Inia y privados. El lanzamiento fue presenciado por el director de Opp, Álvaro García, y el ministro de Ganadería, Tabaré Aguerre.
El objetivo de la Red Nacional de Biotecnología Agrícola es crear una red tecnológica sectorial que contribuya al incremento de la productividad y adaptabilidad del cultivo de soja en Uruguay, mediante la mejora de la tolerancia al estrés abiótico —énfasis en sequía-calor— y biótico —énfasis en roya y cancro de tallo—.
Además busca instalar una capacidad local básica para aplicar herramientas biotecnológicas en forma integral a los programas de mejoramiento del cultivo.
Para lograr tal beneficio, la red dispone de una inversión de 1,5 millones de dólares, financiada por la Agencia Nacional de Investigación e Innovación, el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria y una cuotaparte que otorga el sector privado.
En el acto oficial el titular de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (Opp), Álvaro García, remarcó la importancia de generar lugares de encuentro para intercambiar conocimientos e ideas entre científicos, investigadores, empresarios y productores.
Afirmó que la gestión actual que dirige pregona la articulación pública-privada, la profundización de conocimiento e investigación y la competitividad con el ordenamiento institucional en el apoyo a programas o proyectos.
En ese sentido, resaltó la creación de la Dirección Nacional de Planificación y el Sistema Nacional de Competitividad, sobre los que sostuvo, “permitirán ordenar y potenciar la cancha a favor de estos procesos para beneficio del país”.
En tanto, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, expresó que la Red Nacional de Biotecnología Agrícola es un buen ejemplo sobre cómo generar atractivos para incorporar la inversión privada en actividades de investigación y desarrollo. Al respecto consideró: “El rezago de aportes privados con respecto a lo que otorga el sector público es grandísimo”.
Aguerre añadió que este instrumento es adecuado para mejorar la eficiencia de los recursos económicos, humanos y para realizar un buen diagnóstico e identificar dónde están las necesidades tecnológicas.
La presentación se realizó en la Estación Experimental “Wilson Ferreira Aldunate” del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria en Las Brujas. En la primera parte de la actividad, fueron homenajeados los 37 mejores estudiantes de las facultades de Ingeniería y Veterinaria, quienes accedieron a una oportunidad laboral en el INIA.
PRECIOS Y RENDIMIENTOS.
En la actividad se informó que la investigación e innovación en biotecnología resulta de suma importancia para el sector agropecuario en Uruguay. En particular la soja, que ha crecido hasta convertirse en el principal cultivo del país con cerca de 1,4 millones de hectáreas, utiliza prácticamente en su totalidad semillas mejoradas a partir de métodos moleculares.
En Uruguay, la productividad física —kilogramo por hectárea— del cultivo de soja se ubica en 2.500 kilos por hectárea; resgistros ubicados por debajo del promedio de productividad de países como Argentina, Brasil y Estados Unidos.
El precio promedio de la soja en la zafra 2013-2014 fue 480 dólares por tonelada; en la actualidad se ubica en 340 dólares.