Sostienen que soja perdió potencial pese a las lluvias_05.03.2015
Prácticamente llovió en todos lados, pero hay zonas más complicadas como Florida y Durazno, donde el agua fue escasa y los cultivos de la oleaginosa “todavía están con un problema de pérdida de potencial”, confirmó Carlos Dalmás, consultor agrícola privado. La misma visión tienen otros técnicos consultados por El País.
En los casos en que el agua llegó en el momento justo, principalmente en el norte, las chacras “perdieron algo de potencial, pero habrá que esperar algunos días para ver cómo reaccionan los cultivos”, estimó Dalmás. “De todos modos, creo que alguna pérdida de rendimiento habrá y sin duda, no va a ser la cosecha récord que se esperaba, por lo menos eso es lo que se ve recorriendo las chacras tras la lluvia”, agregó.
Este asesor privado sostiene que la soja viene algo atrasada respecto al año pasado y eso hará que las trillas se vayan a los primeros días de abril.
“No creo que la cosecha comience antes y se va a concentrar mucho, porque hay gran cantidad de soja plantada en la misma fecha”, estimó Dalmás.
El técnico explicó que el pasado mes de enero llovió muy poco, el cultivo venía con un enorme desarrollo vegetativo y como “venían con buenas condiciones como que se atrasaron un poco”. Según la visión de Dalmás, probablemente, al final, “comiencen a apurarse, pero salvo en algún lugar puntual, será difícil que comiencen las trillas antes de abril”.
Todavía es bastante complicado estimar un rendimiento promedio, pero no sería descabellado pensar en un rinde por debajo de 2.500 kilos por hectárea, entre sojas de primera y de segunda.